Skanska inicia la construcción de un importante proyecto de remodelación de la terminal de carga del aeropuerto de San Francisco.

Skanska ha comenzado la construcción de un importante proyecto de nuevas instalaciones de carga en el Aeropuerto Internacional de San Francisco (SFO), en Estados Unidos. Imagen: Skanska

El proyecto de remodelación, que comprende un nuevo edificio de carga y un edificio auxiliar de mantenimiento de equipos de servicio en tierra (GSE), permitirá al aeropuerto satisfacer la creciente demanda de carga y mejorar la eficiencia y la seguridad de las operaciones.

La nueva instalación de carga incluirá 95.000 pies cuadrados de área de carga y 25.000 pies cuadrados de espacio de oficinas en el entrepiso.

También contará con una plataforma de maniobras terrestres con capacidad para aproximadamente 30 camiones, que se extenderá desde West Field Road. El centro de mantenimiento de equipos de apoyo en tierra (GSE), de 17 000 pies cuadrados, estará ubicado en el mismo sitio, pero físicamente separado de la terminal de carga principal.

“Este proyecto es un paso fundamental en la modernización de la infraestructura del aeropuerto SFO y brindará importantes beneficios a las aerolíneas, los operadores de carga y los pasajeros por igual”, dijo Gordon Childress, vicepresidente ejecutivo y gerente general de Skanska USA Building en California.

Se afirma que el proyecto se alinea con los objetivos de sostenibilidad de San Francisco, incorporando paneles solares fotovoltaicos, sistemas de almacenamiento de baterías e infraestructura preparada para vehículos eléctricos (VE) para dar soporte a futuros inquilinos. El diseño también prioriza la iluminación natural y el uso de materiales sostenibles para reducir el consumo de energía y minimizar el impacto ambiental.

Se dice que se están utilizando métodos de construcción únicos para superar los desafíos, incluidas las estrictas restricciones de altura cerca de las pistas de aterrizaje que limitan la altura de las grúas y requieren la instalación de pilotes en múltiples secciones soldadas.

Los obstáculos que plantean las infraestructuras obsoletas y los servicios subterráneos no documentados se están abordando mediante una extensa investigación del terreno, que incluye el uso de radar de penetración terrestre (GPR), rastreo y sondeos, para crear un registro preciso de las infraestructuras existentes.

El proyecto también promueve la participación económica inclusiva a través de su compromiso con las Empresas Comerciales Locales (LBE).

El proyecto, que se está llevando a cabo mediante el método de diseño y construcción con Woods Bagot como arquitecto, se estima que estará terminado a principios de 2028.