La farmacéutica GSK construirá una fábrica en Estados Unidos de 1.200 millones de dólares

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La empresa con sede en Londres hizo el anuncio como parte de una inversión más amplia de 30 mil millones de dólares en investigación y desarrollo e infraestructura de la cadena de suministro en Estados Unidos durante cinco años, mientras el presidente Donald Trump llegaba a Gran Bretaña para una visita de estado.

La fábrica en Pensilvania producirá nuevos medicamentos para enfermedades respiratorias y cáncer. Está previsto que la construcción comience en 2026.

La compañía también invertirá en tecnología digital, en la fabricación de nuevos fármacos y en un mejor ensamblaje de dispositivos en las cinco plantas de GSK en Estados Unidos.

Su decisión de expandir su presencia en Estados Unidos sigue las amenazas de Trump de imponer aranceles de importación a la industria y busca impulsar la fabricación nacional.

“Esta inversión histórica creará decenas de miles de empleos estadounidenses y garantizará que medicamentos y tecnologías esenciales se desarrollen y fabriquen aquí mismo, en suelo estadounidense, donde pertenecen”, afirmó el secretario de Comercio de Estados Unidos, Howard Lutnick, en un comunicado compartido por GSK.

El primer ministro británico, Keir Starmer, dijo en el comunicado que la inversión era un "poderoso ejemplo de cómo la colaboración entre el Reino Unido y los Estados Unidos estaba generando un impacto en el mundo real: mejorando la salud de las personas, creando oportunidades y potenciando el crecimiento".