La construcción en el Reino Unido "parece haber dado un giro" tras un difícil comienzo en 2024

Así lo indica la última encuesta realizada a compradores del sector de la construcción en el país. El índice de gerentes de compras (PMI) del sector de la construcción del Reino Unido de S&P Global, que mide los niveles de actividad en el sector, registró una puntuación de 53,6 en agosto (donde un valor de 50,0 indica que no hubo cambios).

Fue el sexto mes consecutivo en que el índice estuvo en territorio positivo y, si bien el ritmo de expansión se desaceleró desde el máximo de 26 meses de 55,3 registrado en julio, S&P Global dijo que el crecimiento "robusto" de nuevos pedidos y un contexto económico más favorable indicaban una recuperación en los volúmenes de construcción.

La actividad comercial fue el segmento con mejor desempeño (puntuación 53,7), a pesar de que el ritmo de crecimiento cayó a su nivel más bajo desde marzo. Las empresas notaron un aumento en las consultas de ventas y la publicación de nuevos pedidos tras las elecciones generales.

La actividad de ingeniería civil obtuvo un resultado de 51,8, aunque se expandió a un ritmo “notablemente más débil” que en julio.

La obra residencial cobró impulso y alcanzó su nivel más rápido desde septiembre de 2022 (52,7), respaldada por menores costos de endeudamiento y mejores condiciones del mercado.

Los encuestados sugirieron que la mejora de las condiciones económicas y una mayor estabilidad política interna habían aumentado la demanda de los consumidores.

Tim Moore, director económico de S&P Global Market Intelligence, dijo: “El sector de la construcción del Reino Unido parece haber superado un período difícil en 2024, con un vigor renovado en el segmento de la construcción de viviendas como el desarrollo más notable en agosto.

“La mejora de las carteras de ventas y la recuperación de las condiciones de la demanda generaron un grado relativamente alto de optimismo empresarial en todo el sector de la construcción. Sin embargo, algunas empresas mencionaron una desaceleración de la actividad de ingeniería civil y preocupaciones sobre las perspectivas de las obras de infraestructura como limitaciones a las expectativas de crecimiento”.