El banco encuentra otros 217 millones de euros para el proyecto de carreteras retrasado de Uganda y Ruanda

La nueva financiación cubrirá la ampliación de las obras de la autopista Busega-Mpigi, de 27,3 km, incluyendo nuevos intercambiadores, puentes, plazas de peaje y carriles de servicio, así como la compensación por la expropiación de terrenos y el apoyo a la gestión del proyecto. El coste total del tramo ugandés ha ascendido a 424,6 millones de euros, frente a los 176,3 millones iniciales, lo que, según el Banco Africano de Desarrollo (BAfD), refleja la mayor envergadura del proyecto.

El contrato de construcción, adjudicado en 2019 a un consorcio chino liderado por la Corporación de Construcción de Ingeniería Civil de China (CCECC) y el Grupo de la 19.ª Oficina Ferroviaria de China, tenía como fecha de finalización prevista inicialmente para 2022. Sin embargo, el progreso se vio ralentizado por las interrupciones causadas por la COVID-19, las disputas sobre indemnizaciones y el terreno pantanoso. A principios de 2022, solo se había completado el 15 % de la obra, y la fecha de finalización se pospuso primero a 2025 y luego a 2027. Actualmente se prevé que el proyecto esté totalmente finalizado en 2030.

Según el Banco Africano de Desarrollo (BAfD), la financiación adicional permitirá la construcción de siete nuevos puentes y 54 km de canales de drenaje revestidos. Se prevé que la construcción, conforme al plan revisado, se reanude a principios de 2026.

“Este proyecto es más que una carretera; es un salvavidas para las comunidades y una puerta de entrada al comercio”, dijo George Makajuma, ingeniero principal de transporte del Banco.

Una vez terminada, se espera que la autopista reduzca el tiempo de viaje entre Busega y Mpigi de más de dos horas a menos de 45 minutos y cree más de 1.200 puestos de trabajo durante su construcción y operación.